Más de cien damas hermosas

Más de cien damas hermosas. Manuel Peña Muñoz

Los libros de adivinanzas tienen la peculiaridad de permitir al niño iniciarse en la lectura de versos que los ponen en contacto con formas de la poesí­a folclórica de métrica sencilla y gran musicalidad. Además, las adivinanzas también son una forma ideal para que los pequeños comiencen a descifrar metáforas, un tropo al que, con gran frecuencia, apelan los poetas pupulares y cultos. Si unimos a lo anterior su carácter lúdico, entenderemos por qué este tipo de obras suelen ser tan cálidamente recibidas por los pequeños y, también, por los adultos.

Con el sugerente tí­tulo de Más de cien damas hermosas, el escritor e investigador chileno Manuel Peña Muñoz da a conocer una recopilación adivinanzas procedentes de la rica tradición hispanoamericana. Las hay divertidas y alegres ("Salgo de la casa/ voy a la cocina/meneando la cola/ como una gallina"); otras en cambio, son más lí­ricas y filosóficas ("Llenos de hojas están/ pero árboles no son/ estos amigos tan buenos/ adivina quiénes son"). Todas, sin duda, retadoras de la inteligencia y sensibilidad de quien las lee y descifra.

Cada acertijo viene acompañado de una ilustración que ocupa una o dos páginas. Y esas imágenes “que suelen dar una pista para dar con la respuesta del enigma “ fueron creadas por el también chileno Ví­ctor Mahana Nazary apelando a técnicas disí­miles (dibujo a lí­nea y en computadora, collage, pintura al óleo...) y a estilos artí­sticos muy diferentes del arte contemporáneo (surrealismo, pop art, hiperrealismo, grafismo...).

Un buen regalo para poner en las manos de cualquier niño.

Sergio Andricaí­n